Imagina llevar más de 10 años siendo un referente en tu sector.
Hasta que un día, todo lo que has construido a lo largo de esos años empieza a asfixiarte.
Porque te has dado cuenta de que llevas más de una década haciendo lo que otros esperaban de ti.
Y ese esfuerzo por cumplir con las expectativas de los demás te ha destrozado por dentro, hasta tal punto que necesitas frenar en seco y replantearte quién eres realmente.
Eso es lo que le pasó a Mäider Tomasena en 2023.
Por si no la conoces, Maïder es una de las mayores referentes del copywriting en España.
Y en 2023 desapareció de las redes sociales durante 8 meses. Casi un año entero sin publicar absolutamente NADA.
Hace poco subió a YouTube un vídeo explicando los motivos que la llevaron a tomar esa decisión tan drástica. Y muchas de las frases que dice en ese vídeo han resonado muchísimo conmigo.
Frases como:
- “Es superdifícil plantarte delante de una versión de ti que no reconoces”.
- “Jamás me había sentido tan infeliz, tan agotada y tan estresada”.
- “Estaba muy distraída siguiendo el camino de ‘Esto es lo que todos esperamos de ti’, y no el camino que dice ‘Esto es lo que TÚ quieres’ ”.
- “Estaba atrapada en algo que ya no me representaba, porque veía una desconexión cada vez mayor entre mis valores personales y la dirección que estaba tomando mi empresa.”
- “Estaba siendo la persona que necesitaba ser, pero no la que yo quería ser”.
Por desgracia el caso de Maïder, ni es único, ni tampoco es exclusivo de los grandes referentes.
Lo sé de primera mano.
Durante mi etapa dentro del sector del marketing, antes de lanzarme como coach ecointegrativa, llegué a ver muchos profesionales que cometían el mismo error.
Profesionales que, en el camino por hacer crecer sus marcas “a cualquier coste”, se habían dejado de lado a sí mismos.
Hasta el punto de que algunos de ellos llegaron a quemarse y a sentir deseos de dejarlo todo.
Y te hablo tanto de marcas con mucho recorrido como de emprendedores primerizos (porque no, no hace falta llevar 10 años al frente de tu negocio para llegar a ese punto; esto es algo que puede ocurrirte en cualquier momento).
Esas experiencias dejaron una impresión muy fuerte en mí.
Y son en gran parte la semilla del que hoy es uno de los conceptos centrales de mi propia filosofía como coach y consultora de marca personal.
“ConSentido”.
Un término que define mi manera de trabajar y de entender las estrategias de marca.
Por eso, si estás pensando en contratar mis servicios (ya sea como coach o como consultora de marca personal), es muy importante que entiendas qué significa para mí este concepto y cómo lo aplico dentro de mi método.
Eso es lo que pretendo transmitirte en este artículo.
¿Me acompañas?
Los dos significados que tiene “ConSentido” dentro de mi filosofía
El concepto “ConSentido” se puede leer de dos maneras:
- Con sentido.
- Consentido (del verbo “consentir”).
Y ambas tienen su razón de ser dentro de mi método.
Te las explico.
1. Con sentido
Cada paso que des dentro de tu estrategia debe tener sentido para tu marca personal, pero también para ti.
Sentido a nivel:
- Estratégico: debe existir una coherencia entre todos los elementos de tu marca. La manera en la que comunicas, los temas de los que hablas, los canales y formatos que utilizas, la audiencia a la que te diriges… Todos estos elementos deben estar alineados y tener sentido dentro del contexto de tu marca.
- Personal: pero tu estrategia también debe ser respetuosa con tus propias necesidades.
Te pongo un ejemplo real de este último punto que me ocurrió hace poco.
Hablando con una chica emprendedora, me decía:
“Marta, yo no puedo cobrar tarifas high ticket por mis servicios como me recomendaba un mentor, porque eso sería como no permitir el acceso a las personas a las que quiero ayudar. Y eso me desconectaría de mi esencia, de lo que yo quiero”.
En el caso de esta chica, la decisión de subir sus precios quizá tendría sentido para su marca, pero no para ella como persona.
¿Qué pasa cuando te centras en lo primero y te olvidas de lo segundo?
¿Cuando haces “todo lo que se supone que hay que hacer” para que tu marca crezca, incluso si esa estrategia no tiene sentido para ti?
Pues que aparecen los bloqueos y el autosabotaje.
2. Consentido (del verbo “consentir”)
Tu estrategia también tiene que consentirte (cuidarte) tanto a ti como a tu marca.
Y de nuevo, esto funciona en los dos ámbitos:
- A nivel personal: las acciones que lleves a cabo deben sentarte bien y estar alineadas con tu momento vital. Imagina, por ejemplo, que estás transitando una etapa de cambios (a nivel personal y profesional) y no sabes hacia dónde quieres que se dirija tu marca. En ese caso está bien darte espacio para explorar y no imponerte objetivos rígidos con los que realmente no te sientes cómodo.
- A nivel de marca: pero cuidarte a ti no implica que puedas descuidar tu marca. Ella también necesita que la consientas y la mimes. Es decir, que no la dejes olvidada o descuidada. Si una semana estás desbordado, no pasa nada porque publiques menos contenidos en tus redes sociales. Pero si sistemáticamente publicas solo cuando “te apetece”, ahí ya estarías olvidándote de tu marca.
Se trata de encontrar el equilibrio entre tu lado personal y tu lado profesional.
Y como siempre digo, ese equilibrio no tiene que ser un 50/50.
Aquí es donde entra la importancia de trabajar tu mentalidad y desarrollar tu autoconocimiento.
Porque eso es lo que te va a guiar a la hora de ponerte límites y ser capaz de distinguir dónde está esa línea que, si la rebasas, “petas”.
Los 4 pilares de mi método para desarrollar tu proyecto ConSentido
Ahora ya sabes a qué me refiero cuando hablo de “ConSentido”. Pero ¿cómo aplico yo estas ideas dentro de mi método de trabajo?
Pues al guiar a mis clientes para diseñar sus marcas personales, sigo un sistema que se basa en 4 pilares:
1. Objetivos de la marca
El primer paso que damos es establecer los objetivos que quieres alcanzar.
Porque tus objetivos te dan dirección.
Si no tienes claro hacia dónde quieres que crezca tu marca, pueden ocurrir dos cosas:
- Que acabes desorientado y con la sensación de que no sabes hacia dónde vas.
- Que actúes con objetivos “de prestado”, siguiendo aquellas metas que otros esperan de ti y no lo que tú realmente quieres hacer.
Sobre este tema tengo un artículo publicado donde te explico cómo definir tus objetivos estratégicos.
2. Planificación estratégica
Dentro de la planificación estratégica definimos qué pasos vas a dar cada día para alcanzar ese objetivo que te has propuesto.
Una buena planificación (en la que priorizas las tareas más importantes en cada momento y te pones fechas límite para completarlas) te ayuda a avanzar hacia tus objetivos con paso firme y sin perderte por el camino.
A la hora de definir este plan con mis clientes, valoramos si los pasos que hemos definido tienen sentido tanto para su marca como para sí mismos.
3. Accionar e implementar con intención
A mis clientes les hago mucho hincapié en la importancia de accionar “con intención”.
Es decir, escogiendo aquellas acciones que te acerquen a tu objetivo y que tengan sentido para tu marca.
Te lo explico con un ejemplo.
Imagina que uno de los pasos que has definido dentro de tu plan estratégico es publicar contenidos en Instagram para construir una comunidad en torno a tu marca.
Pero a la hora de elaborar esos contenidos dedicas muchísimo tiempo a la parte del diseño para que queden “perfectos”.
Tiempo que le estás quitando a otras acciones que tendrían mucho más sentido dentro de tu estrategia ahora mismo.
En este caso estaríamos accionando, sí; pero no con intención (tener unas publicaciones muy atractivas visualmente no es lo que más te va a ayudar a construir esa comunidad).
4. Mentalidad
Por el camino surgirán bloqueos de mentalidad (yo los llamo “bloqueos en el ser”).
Momentos en los que incluso te resultará difícil seguir adelante, aunque tengas muy claro qué pasos debes dar y cómo hacerlo.
En estos momentos es necesario un trabajo profundo de autoconocimiento para ser capaz de entender qué te está ocurriendo y cómo trabajar sobre esos bloqueos.
Además, como te decía antes, un mayor autoconocimiento te ayudará a identificar dónde están tus límites para no rebasarlos.
¿Quieres trabajar conmigo y que te ayude a desarrollar una estrategia de marca ConSentido?
Todo esto que te he explicado lo aplico en mi programa de marca ConSentido.
Un programa donde te acompaño en el proceso de definir (o redefinir) las bases estratégicas de tu marca personal para lograr posicionarte como un referente en el mercado (y que, al mismo tiempo, esa marca siga teniendo sentido para ti como persona).
Si todo lo que te he contado aquí ha resonado contigo y quieres que te acompañe en este camino, te animo a reservar una sesión de valoración gratuita.
En ella podremos conocernos y veremos si soy la persona adecuada para ayudarte.
Sea cual sea el camino que tomes para seguir haciendo crecer tu marca, recuerda hacerlo (ahora más que nunca) ConSentido.
Con cariño, Marta Q.